Qué debo hacer si mi hijo se droga es una preguntas que seguro te ha llevado a este artículo. Si acabas de descubrir que tu hijo se droga o sospechas que lo hace, primero quiero pedirte que respires profundo. Sé que tu corazón está hecho pedazos y que la culpa puede hacer que pierdas la razón en cuestión de segundos. Sin embargo, hay que aplicar el ‘cuenta hasta diez’, varias veces, créeme, lo vas a necesitar. Es posible que tu hijo esté consumiendo nicotina, alcohol, drogas o tenga comportamientos compulsivos que están interfiriendo en sus actividades cotidianas. Respira profundo… una vez más, sé que tienes miedo y que quieres encontrar el sitio correcto. Por lo pronto, te digo que ya lo encontraste, ahora, ¿Qué debes hacer si tu hijo se droga?
El hecho de que descubras que tu hijo está siendo dependiente, es sólo el primer paso, debo confesarte que vienen conversaciones fuertes, que te harán sentir incómodo como padre, hermano, pareja o amigo. La única manera en la que puedes ayudar a tu hijo, es asumiendo la realidad, negarlo o minimizar lo que está pasando, no te ayudará en nada. Si realmente quieres obtener resultados positivos, empieza lidiando con tus propias frustraciones.
LA CULPA DE LA ADICCIÓN ESTE DE MÁS
Bien, sé que en este momento tu cabeza no está dispuesta a parar, son muchos los pensamientos que te agobian, pero déjame decirte que encontrar un culpable no ayuda en nada, el objetivo aquí es encontrar una solución. Lo que recomiendo, como primer paso, es poner las cartas sobre la mesa antes de hablar con el adicto. Por ningún motivo, hay que juzgarlo ni ofenderlo. Pregúntate, cuando algún familiar está enfermo, ¿lo atacas? Sí, leíste bien, es un individuo pasando por una racha muy mala.
Definitivamente, no tienes ni idea las tantas veces que se ha ofendido a sí mismo, no quieres escuchar que también tú lo haces. El adicto necesita comprender que no es su culpa, que la situación se le ha salido de las manos y que debe entender que no puede solo, pero está bien pedir ayuda. Exactamente, es lo que estás pensando, hay que ponerse en sus zapatos, ser empáticos. Sin embargo, la empatía no es ponerse en el lugar del adicto desde tu realidad, tienes que intentar comprender desde la suya.
¿Es válido indagar en sus cosas?
Esta pregunta es muy frecuente entre los padres que acuden a mis servicios. Entiendo que es tanta su preocupación que necesitan buscar entre las pertenencias del adicto. Cabe resaltar que si se trata de un menor de edad, con toda la pena del mundo, pero tú debes centrarte en tu objetivo principal, es decir, proteger su bienestar en todos los sentidos. Si ya le estás dando vueltas a la duda de que si es o no adicto, entonces busca evidencia, para que no pueda negarlo fácilmente durante la confrontación.
Prepárate para las ofensas
La resistencia es un hecho, prácticamente es extraño el adicto que acepte la ayuda con una sonrisa en el rostro y caminando directo hacia la sanación. No se trata de algo milagroso, tienes que ubicarte en lo caótica que es la situación, prepararte para ser ofendido, incluso si eres su padre o padre. Ten en cuenta que el adicto está luchando con sus propios demonios, no es para justificarlo y mucho menos victimizarlo, pero le frustra no tener el control y hará lo que sea para demostrar que no lo ha perdido, aunque en el fondo sepa que no es así.
Antes de hablar con tu hijo adicto, analiza el tema con la persona más cercana, ya sea, el padre, la pareja o un hermano. Con esto quiero decirte que la red de apoyo debe ser firme, con los mismos objetivos, porque si tienes ideas diferentes puede ser contraproducente. Es un compromiso, por eso como padre o madre, te pido que analices bien tu decisión, no es sano dar un paso atrás, incluso si las primeras semanas son desgastantes.
Por otro lado, tu hijo adicto no quiere escuchar comentarios innecesarios, tus críticas déjalas para después. Es el amor, el principal motor, no hay más. Aclaro amar no tiene nada que ver con ser permisivo, si quieres que el adicto se rehabilite vas a tener que decirle que no varias veces y no por llevarle la contra, es por su bien.
CÓMO CONECTAR CON TU HIJO ADICTO
Una manera efectiva en la que puedes iniciar la conversación con tu hijo adicto es hablándole de tu experiencia con las drogas. Por ejemplo, ser honesto, decirle que en algún momento pensaste en probar las drogas sólo por presión o querer encajar en algún círculo social. Hay que enfocarse en que las sustancias son capaces de acabar con una vida, a veces, de manera acelerada y otras veces paulatinamente. Aquí puedes aprovechar como para mencionar algunos ejemplos cercanos con un mal desenlace.
En caso de que tu hijo se manifieste a favor del consumo de drogas o minimice la acción, entonces dale un buen argumento para hacerlo reflexionar. Sirve mucho hacer énfasis en que estar sano y sentirte seguro es lo mejor que puedes hacer para no depender de una droga. Si él se pone reflexivo y lo confiesa, entonces puedes decirle que no estás de acuerdo en ello, pero entiendes que todos cometemos errores y estás ahí para ayudarlo.
Otro punto que puede ayudar es hablarle de tus equivocaciones, hacerle ver que las cosas no siempre han sido perfectas en tu vida, como él cree, puede ayudarle a sentirse menos frustrado y más comprendido.
Hay que sentirse incómodo para lograr un cambio
Como te mencioné anteriormente, no esperes que combatir una adicción sea fácil, el enojo estará a la vuelta de la esquina, porque a nadie le gusta que interfieran en su rutina, da igual lo negativa que esta sea. Sólo recuerda si a ti, como padre o madre, te resulta una situación bochornosa e incómoda, imagínate cómo se siente tu hijo adicto. Él no permitirá quedar como el villano del cuento, pondrá todas sus cartas sobre la mesa. No te sorprenda que te mienta, intente manipularte o chantajearte. Te dirá que no confías en él, ¿te digo algo? Es cierto, porque no lo conoces.
Entonces, debes prepararte para mantener la serenidad, sin importar lo agobiante que se vuelva el momento. Si tu hijo se molesta, grita o empieza a aventar cosas, ignora, no caigas en su juego, quiere distraerte para que la adicción pase a segundo término.
Ahora bien, tampoco se trata de tolerar sus groserías o comportamientos agresivos, si se pone muy necio, date un tiempo, sal de casa y regresa con más determinación para continuar la conversación. Desde luego, decirle a tu hijo lo mucho que lo amas y que te preocupas por su bienestar, es indispensable.
Combatir la adicción desde el amor, no la humillación
Sé que tal vez no te agrade lo que te voy a decir, pero no es el fin del mundo, actuar de manera impulsiva, desesperada y agresiva, es muy negativo. El drama entorpecerá el proceso de rehabilitación. Entre tanto, no te quedes con sólo lo que te diga el especialista, buscar información es muy recomendable.
Haz un plan con toda la red de apoyo que quiere que el adicto se recupere. Poner en una lista hábitos saludables que pueden encajar con la personalidad del paciente es un primer paso. Sin embargo, no hay que esperar que lo haga de la noche a la mañana. Recuerda, un día a la vez. Es cuestión de cercanía, amor y disciplina.
QUÉ PASA SI MI HIJO SE DROGA Y ES ADULTO
No te voy a mentir, si tu hijo adulto es dependiente de una droga, la situación se vuelve el doble de complicada, porque no puedes obligarlo a nada. Sus libertades cambiaron desde hace tiempo y ahora eres tú quien debe buscar un espacio en su agenda. Así que, el primer paso para ayudarle a salir de ahí, es demostrando paciencia, dicen que nadie le tiene paciencia a alguien que no ama.
El siguiente paso es aterrizar cuál es su enfermedad, es decir, si es adicto a las drogas, el alcohol, los videojuegos o tiene otro tipo de comportamiento negativo. Lo mejor es que enriquezcas tu mente sobre el tema, pero siempre apoyado de un especialista, porque en la red hay mucha información sensacionalista y sin fines educativos. Saber contra lo que tu hijo está luchando, es una manera de comprenderlo. Tú no sabes las tantas veces que se ha prometido que ya no más, pero vuelve a caer.
Es muy frustrante estar en la ola en la que quiere, pero no puede. Tu hijo adulto y adicto, quiere escuchar que te importa, que te preocupa su bienestar, pero seguramente se va a molestar cuando hables sobre los efectos negativos que las drogas tienen en una persona. No le será fácil admitir que está mal, prefiere autoengañarse que asimilar la realidad, en su mente todavía cree que tiene el control, pero no es así.
Apoyo psicológico también para ti
El apoyo psicológico no sólo sirve para el paciente adicto, también para ti como familiar, que quieres ayudarle a que salga de ahí. La clave está en encontrar un punto medio, en el que puedas escucharlo y también se pueda expresar. Por ningún motivo, intentes darle el sermón más grande de su vida, está en negación, no servirá de nada, simplemente, te desgastarás a nivel físico y mental.
Otro error que cometen los padres, es plantear en su hijo una idea soñadora, quieren ver resultados a muy corto plazo y sienten que, con sólo decirlo, serán cumplidos, pero no. Tampoco hagas hincapié de manera exagerada en el tema de las drogas, ya se sabe, no hay necesidad de estarlo recordando todo el tiempo. Tu hijo adulto y adicto no es culpable de su estado, aunque eso parezca.
Si te empeñas en hacerlo sentir mal por sus acciones, sólo vas a provocar que se frustre y se aleje más de lo que ya lo ha hecho.
QUÉ HAGO SI MI HIJO NO QUIERE VENCER SU ADICCIÓN
Quizás, de todo el artículo, esta es la parte más complicada y dolorosa, porque ningún padre o madre quiere escuchar que llegó el momento de romper con el cordón umbilical. Es decir, esta es la vida real, los padres sueltan a los hijos y llega un momento en el que no pueden protegerlos. Aunque te duela y te angustie su bienestar, si tu hijo no quiere recibir ayuda, no puedes salvarlo.
Te lo digo de todo corazón, no hay nada que deteriore más que el alma, que intentar hacer todo lo que está en tus manos para ayudar a alguien que no está dispuesto a cambiar. De nada sirve que inviertas toda tu energía y te pongas tu bienestar en el último sitio de tu lista. Puedes ofrecerle opciones, decirle cosas para que tome consciencia, pero solucionarle la vida.
Qué pasa cuando si tu hijo adulto no te respeta y te roba
Sin duda, tener una adicción no es nada económico, requiere tiempo, dinero y esfuerzo. Así es, aunque parezca irónico, es prácticamente un compromiso en el que hacerse daño es algo de todos los días. Sin embargo, entre más se hunde el adicto, menos funcional es. Esto quiere decir que su círculo social se va a ir reduciendo. Dejará de asistir al estudio o el trabajo, lo que le cerrará las puertas para pedir dinero o algún otro tipo de favor.
Es posible que comience con un chantaje suave, pero tienes que ser más fuerte y no caer. Darle gusto en un momento de desesperación es lo peor que puedes hacer, porque asumirá que puede acudir a ti para mantener su vicio. Si te vuelves su válvula de escape, estás aceptando ser cómplice de que huya de sus responsabilidades.
Tu salud física, mental y emocional, también importa
De hecho, centrarte en tu salud mientras tu hijo es adicto, no es para nada egoísta, necesitas estar fuerte para sobrellevar las altas y bajas que implica el proceso de sanación. Para empezar no intentes ayudar desde la culpa. A veces, el adicto se siente acorralado y lo único que puede hacer para defenderse es culparte. Sin embargo, siendo un adulto, le corresponde a él mismo tomar las riendas de su camino y asumir las consecuencias de sus actos.
Sé que como padre no es fácil asimilar que tu hijo vive sumergido en adicción, pero ponerle límites es la manera más efectiva de ayudarlo. No obtendrá todos los caprichos que le pasan por la mente, sólo porque está enfermo. Definitivamente, negarle algunas lo hará más consciente.
Por qué es bueno acudir con un especialista en adicciones
Por supuesto, que en el mundo de los terapeutas, hay muchísimas opciones. Basta con que tomes un segundo de tu tiempo para buscar en la red y que te arrojen distintos métodos. Como profesional, no me corresponde decirte si son buenos o malos, pero no caigas en aquellos que te prometen resultados en un abrir y cerrar de ojos. Dejar de ser adicto requiere un trayecto extenso, el cual no es para nada gratificante. El objetivo es desintoxicarse y por ello lo más recomendable es que sea alguien experto en adicciones. En mi caso, conozco el tema de manera profunda, estuve en esa situación, en la que creí que no recuperaría mi vida, pero hoy puedo ayudar a otros. No dudes en ponerte en contacto.
¿TODOS LOS ADICTOS NECESITAN SER INTERNADOS?
Una duda que atormenta a los familiares, sobre todo, porque cargan con mucha culpa y eso les impide ver la situación de manera objetiva. Sin embargo, para determinar si tu hijo debe o no ser ingresado a un centro para su sanación, hay que hacer una serie de consultas no sólo psicológicas sino también médicas. Una vez que se establece el nivel de gravedad se puede emplear el tratamiento más oportuno. Hay una gran diferencia entre un hijo que está dispuesto a ser ayudado al que no.
Particularmente, te ofrezco el tratamiento conductual ambulatorio, el cual consiste en que el paciente tome terapia de manera frecuente. Por supuesto, incluye programas grupales, no solo la terapia individual. Este método ayuda a que el adicto sea capaz de reconocer su enfermedad y afrontarla. Se le brindan las herramientas necesarias para fortalecer su salud mental, física, emocional, pero en especial espiritual.
De ahí que el modelo Minnesota es pieza clave, el cual plantea doce pasos en los que el paciente confronta su situación de una manera sana, sin ser juzgado y mucho menos culpado por lo que está viviendo. En nuestro sitio puedes encontrar información más detallada sobre dicho modelo. De ahí que la terapia familiar multidimensional concientiza sobre el consumo de drogas, alcohol y otros comportamientos compulsivos.
Motivación y más motivación…
Si tu hijo se droga necesita motivación, es por ello que ofrecemos entrevistas motivacionales, en las que se pueda determinar el avance de los pacientes. De igual manera, se cuenta con un programa de incentivos, sus avances no se toman a la ligera, hay que reconocer conforme va subiendo un escalón más.
Cabe destacar, que en un principio el tratamiento es muy caótico, las sesiones ambulatorias pueden ser más frecuentes, pero conforme se va notando un cambio disminuye la presión.
Pero, ¿Qué hay sobre el tratamiento residencial? A veces, como padre resulta muy complicado asimilar la idea de encerrar a tu hijo, te preocupa lo que pueda pasarle, lo entiendo, pero es mucho peor si se sigue consumiendo. Sin embargo, cuando el adicto es internado, está supervisado las 24 horas del día, con atención médica y seguridad. Este tipo de tratamiento no es más invasivo que el ambulatorio, simplemente, se hace para que el adicto se adapte a un modelo de vida completamente diferente. Por lo regular, los adictos a sustancias, requieren una desintoxicación profunda, así que al estar internado se facilita el proceso.
¿Cómo puedes ayudar a que salga de las drogas?
Si eres madre, padre o algún familiar, debo decirte que ya diste el paso más complicado, aceptar la adicción no es nada fácil. Incluso a estas alturas todavía se sigue viendo como una situación estigmatizada. Sin embargo, has dejado de lado prejuicios y los comentarios de otras personas, porque te importa la persona y si has puesto atención durante este artículo, ya te diste cuenta de que no es su culpa, está luchando con los demonios de una enfermedad.
Está bien que quieres ayudarlo a salir de la adicción, que busques ayuda, te informes y lo motives a acudir a terapia. No obstante, debes tener muy claro que no es tu responsabilidad salvarlo y que si dice que no, no puedes hacer más. El adicto también necesita que lo dejen, que toque fondo y asuma que las consecuencias de sus actos no son cualquier cosa. Eso significa que todavía está en negación, dale la oportunidad de que confronte la realidad, aunque le duela.
Llegará el día…
Quizás el momento en el que abra los ojos, no será el que tú quieras, pero lo hará. Respeta su proceso, porque llegará el día en el que se harte de vivir así y como en su momento le ofreciste ayuda de manera genuina, seguramente, te buscará. Aunque claro, hay casos que son sumamente graves, adictos que están hundidos en la droga, ni siquiera pueden tener una conversación cuerda. En estos casos conviene analizar la situación, si es un adulto, requieres asesoría jurídica. Al final, es tu decisión.
Hay adictos que han sido ingresados a centros en contra de su voluntad y obtienen resultados positivos. Te recomiendo que antes de tomar la decisión consultes a un experto, para poner la situación sobre una balanza. De igual manera, si se ingresa y ves que no tiene mejoras conforme avanza el tiempo, quizás hay que considerar otros métodos. Esa es la razón por la que siempre se recomienda que cada adicto entre por su propia decisión.
En fin, cualquier duda, aclaración o sugerencia, estoy a tus órdenes. Recuerda si tú eres quien está luchando contra una conducta adictiva ¡No estás solo! Pero si tú eres quien quiere ayudar a ese adicto, ¡No estás solo! Una intervención a tiempo hace la diferencia.